Desde Washington DC, EEUU – El lunes próximo, la secretaria de Energía Flavia Royón firmará una resolución que vuelve a poner en uso un esquema de incentivos a las empresas del sector petrolero que había lanzado Cristina Kirchner en 2013 y que Mauricio Macri no usó en 2018, en medio de una fuerte crisis cambiaria y de salida de dólares. En rigor, lo que sucedió es que los beneficios del decreto 929, cuyo contenido fue además incorporado a la ley 27.007, sancionada en 2014, nunca fueron reglamentados y, por lo tanto, no se implementaron ni aplicaron.
La seguridad para operar, el acceso a los dólares y la posibilidad de girar dividendos a sus países de origen fueron los principales cuestionamientos de las empresas del sector Oil & Gas que recibieron ayer al ministro de Economía Sergio Massa en la ciudad de Houston. “No te voy a mentir, el tema de los dólares por el momento no se va a resolver”, respondió el ministro a esa consulta. Un reclamo similar, con la misma respuesta, le habían hecho, unas horas antes en la US Chamber of Commerce de esta capital, otro grupo de empresarios.
El objetivo de Massa es “blindar” lo mejor que se pueda, en medio de un contexto de fuerte impacto por la guerra y un escenario de crisis energética global, a las empresas del sector. Piensa hacerlo con dos esquemas: decretos con beneficios concretos de acceso a divisas a cambio de aumentar la producción y una serie de leyes que impulsará en el Congreso para apuntalar los negocios de GNL e hidrógeno como parte de una “ley corta” que dé perspectiva a la industria.
¿Alcanzará? En Economía creen que sirve para comenzar, pero que es un esquema que hay que sostener con la macroeconomía. Hoy, el objetivo es fortalecer las reservas; la escasez de dólares se vuelve un tema central cuando se necesitan inversiones petroleras y también de servicios para el sector. A estas últimas empresas -agrupadas en CEOPE -la Cámara de Servicios Petroleros- se les prometió en Houston avanzar en un esquema similar al que se aplicó a la cadena de valor automotriz, que pudo duplicar la exportación. “Estamos yendo desde las operadoras para atrás en su cadena para asegurar que esos sectores tengan acceso a los dólares”, dicen cerca de Massa.
Todas las empresas del sector, las petroleras y las de servicios, celebraron la visita del ministro. Ayer en Houston, incluso, dos de las majors anunciaron inversiones, según fuentes del Gobierno: Chevron sumará 330 millones, a su inversión ya asignada de USD 650 millones, para desarrollar una nueva área en Vaca Muerta llamada Trapeal; y Total unos USD 700 millones para su Plan Fénix en la llamada cuenta Austral de la Patagonia. Seria un total de USD 1.030 millones.
Ayer Massa desayunó con petroleros y luego tuvo encuentros bilaterales. Estuvo acompañado por Royón, el titular de YPF, Pablo González y el de Enarsa Agustín Gerez. Por la tarde visitó instalaciones de Chevron. Hoy, posteó en Twitter la foto que encabeza esta nota y escribió “aquí se registra la actividad de la empresa de exploración, producción y energía global. De manera remota pudimos ver las operaciones de pozos en Neuquén entre otras 50 ciudades del mundo. Además, conversamos sobre el plan de inversiones 2023-2025 de Chevron”.
Algunos analistas esperaban algo más, o al menos compromisos concretos para, por ejemplo, adherir al joint venture, cuyo memorando de entendimiento inicial firmaron días atrás YPF y la malaya Petronas. Se trata de un ambicioso y millonario proyecto para impulsar el GNL que, de concretarse. que incluiría la construcción de una planta generadora y gasoductos, entre otras infraestructuras.
“Para destrabar inversiones hace falta acceder al tipo de cambio, libre giro de dividendos y disponibilidad de divisas en el exterior y disponibilidad de importaciones para insumos. Si Massa va a ver a las petroleras con esa agenda será todo más fácil para analizar inversiones, y hay buenas chances”, resumió días atrás en este medio Ernesto Díaz, VP para la región de la consultora Rystad Energy.
Decretos
La resolución que Royón asegura que firmará el lunes, ni bien aterrice en Buenos Aires, será la nueva puesta en marcha del decreto 929 de 2014, que firmó Cristina Kirchner como primer impulso a Vaca Muerta. Es el Régimen de Promoción e Inversión para la Explotación de Hidrocarburos, también llamado “decreto Chevron” porque la petrolera americana era la única extranjera en ese momento inicial del yacimiento. Y, básicamente, le aseguraba el acceso a dólares.
“Queremos poner en vigencia el reclamo pendiente de las empresas respecto al decreto de disponibilidad de dólares que no cumplió desde la gestión de gobierno anterior”, dijeron fuentes oficiales.
Ese esquema se sumará al nuevo de incentivos que lanzó Massa horas después de asumir, por medio del decreto 277 de este año.
Las empresas petroleras deben abastecer el mercado interno, luego de eso tiene disponibilidad de exportación. En el caso del petróleo, por ejemplo, hay un parte que va al mercado interno, pero el incremental sobre sus planes de inversión informados previamente se puede exportar. Sobre un porcentaje de ese incremental se puede acceder a disponibilidad de divisas.
Si se suma los accesos a divisas de los dos decretos da un 30% sobre el excedente. Por el momento, por la curva de producción alcanzada, la que puede acceder al nivel de acceso a divisas de los dos decretos es Chevron. Petronas está cerca de alcanzarlo e YPF podría acceder el año que viene. El nuevo esquema no será retroactivo.
“Chevron nunca recibió los beneficios que se le prometieron. Quieren seguir invirtiendo en Vaca Muerta y el nuevo decreto es una señal para todas las empresas. Es el Estado, la política, reconociendo que no pagó beneficios que el mismo Estado propuso. Ellos responden a accionistas y necesitaban ese gesto. Son socios de YPF y hasta ahora vienen reinvirtiendo todas las utilidades”, destacó una fuente oficial.
“Queremos que la industria se sienta protagonista y que sepan que los principios de estabilidad jurídica y reglas claras se van a cumplir”, dijo ayer Massa en una reunión con referentes globales del sector en el Instituto Baker de la Universidad de Rice, en Houston.
“Vaca muerta puede duplicar el PBI argentino en siete años y equiparar los volúmenes de agrobusiness”, aseguró.