Benedict Cumberbatch lleva una vida de bajo perfil, y aunque una de las estrellas del Paseo de la Fama de Hollywood lleva su nombre, no tiene redes sociales y elige mantenerse fuera de los reflectores cada vez que su agenda se lo permite. El actor aclamado por su versatilidad y reconocido por encarnar al icónico Doctor Strange en el universo de Marvel, se encuentra en la Argentina. La inesperada visita a nuestro país fue descubierta por una usuaria de Twitter por completa casualidad y las fotos que compartió se viralizaron rápidamente.
Una joven llamada Constanza expresó su sorpresa en la red social del pajarito: “Mi viernes empezó muy tranqui cruzándome a Benedict Cumberbatch en plaza Armenia”. Junto al mensaje incluyó una foto del actor caminando con anteojos negros, sombrero y vestimenta casual para no llamar la atención y poder disfrutar de un momento en familia. La internauta aseguró que pudo charlar con él durante unos minutos: “En mi inglés indio, pero como la esposa hablaba español fue más fácil”.
“Chicos, encima es divino, un amor mal el y su esposa. Se subía a los jueguitos de la plaza, y no tenía problema con las fotos, solo pidió que taparan o borraran a los nenes si las publicaban”, explicó, haciendo referencia a sus tres hijos, fruto de su matrimonio con Sophie Hunter. En cuanto al motivo de su estadía en la capital porteña, todo indica que vino a acompañar a su pareja, que dirigirá Los siete pecados capitales y El castillo de Barbazul en el Teatro Colón a partir del martes 27 de septiembre.
El actor conoció a la directora, dramaturga, actriz y cantante, allá por 2009, pero para ese entonces estaba comprometido con la actriz Olivia Poulet, con quien mantuvo una longeva relación. Cuatro años después el amor a segunda vista fue fulminante, y aunque mantuvieron su romance fuera de las cámaras por un buen tiempo, luego anunciaron que se iban a casar. Luego de su casamiento se convirtieron en padres de Christopher, Hal y Finn, de siete, cinco, y tres años, respectivamente.
“Lo mas random y emocionante de mi vida”, definió la usuaria de Twitter, emocionada por el desenlace de lo que sería una salida casual y se convirtió en la anécdota más inesperada. Este año se estrenó en los cines de nuestro país Doctor Strange en el Multiverso de la Locura, un film esperado por los fanáticos de la saga del hechicero. Demás está decir que no es el único trabajo de su vasta trayectoria: todo lo contrario, el arte de la interpretación le corre por las venas.
Nacido en Londres el 19 de julio de 1976, es hijo de los actores británicos Timothy Carlton y Wanda Ventham. El dos veces nominado al Oscar por “El Código Enigma” y “‘El poder del perro” es de los preferidos de los amantes del cine y uno de los favoritos entre los conductores para entrevistar. Catalogado como “el nuevo rey de los impresionistas”, puede copiar a múltiples artistas como Sean Connery, Tom Hiddleston y John Malkovich.
Perteneciente a una familia de clase alta, el británico -que saltó a la fama por su interpretación de Sherlock Holmes en la serie de la BBC– siempre ha dado que hablar por su trabajo, manteniéndose alejado de los escándalos. En una de sus entrevistas contó que vivió situaciones peligrosas donde sitió que el terror de morir: “Esos eventos sísmicos te dan una perspectiva sobre la mortalidad. Te das cuenta de que no debes preocuparte por las cosas pequeñas. Y solo para disfrutar el paseo de estar vivo”.
Sin ir más lejos, durante un rodaje en Sudáfrica, antes de saltar a la fama, vivió una terrible experiencia: fue secuestrado. En 2005, se encontraba en Santa Lucia, Sudáfrica, rodando To the ends of the Earth, una miniserie de la BBC. En un alto del rodaje, junto a Theo Landey y Denise Black, dos de sus compañeros de filmación, decidió conocer las playas del lugar. El problema comenzó cuando se les pinchó un neumático en medio de la noche y cuando pensaron que alguien se acercaba a ayudar, bajaron de otro vehículo seis hombres enmascarados y con fusiles. Rápidamente los pusieron de espalda y les ordenaron que colocaran sus manos en la cabeza.
En diálogo con The Hollywood Reporter, explicó: “Nos dijeron: ‘¿Dónde está su dinero? ¿Dónde está la droga?’, y en ese momento, esta adrenalina de lucha o huida simplemente explotó en mi cuerpo. Yo estaba como, ‘Vamos a morir’”. Obedecieron cuando los atacantes los obligaron a entregarles sus teléfonos y tarjetas de crédito, y los asaltantes lo metieron en el maletero del auto. Una vez con el vehículo en marcha, la desesperación de Benedict fue a más. Empezó a patear el capot y gritar pidiendo ayuda. “Estaba asustado, realmente asustado. Les dije: ‘¿Qué vas a hacer con nosotros? ¿Nos vas a matar?’”, relató el actor, que temía algún acto salvajismo contra él o sus amigos.
El secuestro duró el tiempo que tardaron en llegar a un cajero automático y extraer dinero con las tarjetas de las tres víctimas. Luego, los hombres escaparon y tanto Cumberbatch como las otras dos personas salieron ilesas. Según sus propias palabras, le cambió la forma de ver las cosas. Ha admitido que, a partir de entonces, quiso asegurarse de que su vida no fuera normal y empezó a buscar nuevas experiencias. “Me enseñó que llegas a este mundo de la misma forma que lo dejas, por tu cuenta. Me hizo querer vivir una vida menos ordinaria”, reflexionó.