Diferencias por límites, volumen de las deudas cruzadas en Yacyretá y el cobro de peaje en la hidrovía a las barcazas de bandera paraguaya hicieron crecer la tensión diplomática con el vecino país y se aceleró desde el 15 de agosto, día en que asumió el presidente colorado Santiago Peña, quien hizo campaña electoral con reivindicaciones sobre esas materias.
La tensión llegó a su clímax cuando una barcaza fue retenida en el puerto de Zárate porque sus capitanes se negaron a pagar el peaje para navegar por el río Paraná y la respuesta fue liberar agua en el brazo de Aña Cuá para condicionar la generación de energía de la represa.
En ese marco, el gobernador, Gustavo Valdés, reiteró sus reclamos por la cuestión de los límites que deja al territorio correntino de Apipé, sin derecho a tener costa sobre el Paraná y ratificó: “A los argentinos nos cuesta millones de dólares el mantenimiento de la hidrovía y es justo que quien la usa pague parte de esos costos”.
Corrientes tiene una posición crítica respecto de las decisiones del gobierno paraguayo en cuanto a tolerar las incursiones armadas de los efectivos de su marina y lo denunció a mediados de junio, cuando efectivos de esa fuerza persiguieron a civiles argentinos hasta la costa de Ituzaingó.
Ayer, en diálogo con periodistas al ingresar a la Casa de Gobierno, Valdés manifestó: “Nosotros veníamos notando cierta agresividad de Paraguay respecto a algunos temas. Ojalá que esto se pueda clarificar, que se pueda sentar la República Argentina con la República Hermana del Paraguay y comenzar a zanjar este tipo de cosas”.
Tras hacer hincapié en las obligaciones que tienen, tanto Argentina como Paraguay, por el tratado que hizo posible la construcción de la represa de Yacyretá, reiteró su referencia al conflicto que afecta a los pobladores de la Isla Apipé.
“Paraguay pretende modificar los límites establecidos por el tratado de Yacyretá”, dijo Gustavo Valdés sobre el diferendo que mantiene la República Argentina con Paraguay por la situación limítrofe en el río Paraná.
Sobre el conflicto por el cobro de peaje sobre el Paraná, Valdés manifestó: “Es lógico y es justo que si Argentina tiene un trabajo de mantenimiento, de construcción, que nos cuesta a los argentinos millones y millones de dólares, entonces que aquel que utiliza la hidrovía pueda pagar en algo para contribuir al mantenimiento de ese canal de navegación”.
Medidas unilaterales
Al hablar sobre la escalada de los diferendos diplomáticos, Domingo Peppo, embajador argentino en Paraguay, expresó: “El conflicto va escalando y no por voluntad argentina, sino por Paraguay. Veníamos trabajando con lo del peaje, pero Paraguay tomó medidas unilaterales que nada tienen que ver con lo que se venía trabajando”.
El diplomático se refirió a una cuestión puntual relacionada con una barcaza retenida en Zárate: “Planteaban que Argentina retuvo la barcaza y que no querían pagar lo que corresponde por tributos. Ellos querían pagar algo como fianza y no de peaje, eso cambió el trámite y la cosa se embarró”.
Asimismo, el embajador argentino en Paraguay manifestó: “Esta semana, Argentina tomará definiciones al respecto; todavía no tengo instrucciones. Estamos esperando la presencia de la secretaria de Energía, Flavia Royón, para ver el tema de Yacyretá, porque lo que hicieron fue una decisión unilateral”.
