El Paraná sigue bajando, pero los evacuados no pueden regresar a sus viviendas

El río Paraná se posicionó ayer en 5,82 metros y continúa en descenso. Sin embargo, las familias capitalinas inundadas aún no regresan a sus hogares. Desde la Subsecretaría de Gestión Integral de Riesgos del Municipio confirmaron a El Litoral que los 11 evacuados en los dos refugios gratuitos continúan en los sitios. Los autoevacuados vigilan sus casas y reúnen  materiales para volver a comenzar.

Las casas de los vecinos que residen en las zonas costeras de la ciudad quedaron cubiertas de agua desde los primeros días de noviembre, afectando a 150 familias que residían en ese sector. El río comenzó a descender la semana pasada aportando alivio, el sábado se mantuvo en 6,06 metros y ayer bajó 24 centímetros alcanzando los 5,82 metros, según los datos de Prefectura Naval Argentina.

Con la crecida, 11 familias tuvieron que resguardarse en los refugios municipales ubicados en el Centro Integrador Comunitario (CIC) del barrio Anahí y el otro en Dispositivo Territorial Comunitario (DTC) del barrio Independencia. Consultado por El Litoral, el subsecretario de Gestión Integral de Riesgos, José Pedro Ruíz, dijo: “Los vecinos siguen evacuados, todavía permanecen los 11 en los refugios”.

Un total de 14 zonas fueron las afectadas por la crecida y cerca de 140 familias tomaron la decisión de autoevacuarse en galpones o viviendas de familiares y amigos, vigilando desde cerca a sus hogares para prevenir robos o usurpación.

La delegada vecinal del barrio Virgen de los Dolores, Emilce Villalba, señaló a El Litoral que “nos arreglamos como podemos, yo cocino acá y muchos vienen a buscar para comer. Lamentablemente, aunque baje el río, no van a poder regresar a sus casas porque tienen que conseguir madera, chapa para poder construir de nuevo”.

Si bien el nuevo nivel del río podría aportar alivio acortando el tiempo para regresar a sus hogares, muchas familias que residen en la costa deben comenzar comprando materiales, ladrillos, chapas, madera, muebles y electrodomésticos.

El panorama se complica ya que muchos de los afectados son pescadores y ladrilleros, y  perdieron su fuente de trabajo.

Para colaborar con el comedor del barrio Virgen de los Dolores, pueden donar mercadería, carne, vegetales. También necesitan colchones, calzados, ropa o frazadas. Los interesados pueden contactarse al 379-4662407 (Emilce).