En diálogo con Radio Ciudad 88.3, el Director de Bromatología de la Municipalidad de Goya, Dr. Pedro Depiaggio, abordó diversos aspectos relacionados con el cuidado de los animales, desde la vacunación antirrábica gratuita hasta la tenencia responsable de mascotas en el espacio público. Sus declaraciones invitan a reflexionar no solo sobre la salud animal, sino también sobre el compromiso social que implica convivir con ellos.
Hay muchas cosas que tenemos que prestar atención en los animales y en este caso al perro no es solamente darle de comer. También hay que propiciar campañas de vacunación antirrábica para perros y gatos, que la municipalidad a través de Bromatología realiza gratuitamente.
Actualmente, la Dirección de Bromatología se encuentra a la espera de una nueva partida de dosis por parte del Ministerio para retomar la campaña en toda la ciudad.
“Ahora cortamos porque estamos esperando la nueva partida del ministerio. Seguramente en cualquier momento nos la van a enviar y volveremos con estas campañas”, aseguró Depiaggio.
Una vez que lleguen las vacunas, se establecerán puntos estratégicos para atender a la mayor cantidad posible de animales.
Según explicó, la lógica de las enfermedades virales como la rabia requiere una estrategia de inmunización colectiva: “Las enfermedades víricas son un problema poblacional. Cuando la mayoría de los animales están vacunados, la enfermedad no se presenta. Ese es el caso de la rabia”, explicó.
También aprovechó para diferenciar las vacunas poblacionales de las individuales: “Hay otras vacunas, como la antitetánica, que cubren individualmente. Por ejemplo, si uno trabaja en el campo y se corta, ya tiene cierta inmunidad. Pero con la rabia es distinto, ahí necesitamos proteger a toda la población animal para evitar brotes”.
Depiaggio recordó que, al igual que en el caso del COVID-19, las revacunaciones anuales son clave: “Con el COVID pasó lo mismo: Salud Pública recomienda una revacunación anual. En el caso del antirrábico, ocurre lo mismo. Nosotros siempre recomendamos la revacunación anual de todos los perros y gatos. Es obligatoria”, subrayó.
TENENCIA RESPONSABLE: CONDUCTA QUE SE APRENDE Y SE CONTAGIA
Más allá de la vacunación, el director de Bromatología hizo especial hincapié en la conducta ciudadana relacionada al cuidado de los animales en la vía pública.
“Nos cuesta asumir que tener una mascota implica responsabilidad. Hay propietarios que, por cuestiones laborales, delegan el cuidado en paseadores, pero ni los dueños ni los paseadores siempre asumen conductas responsables. Por ejemplo, en otras ciudades ya es norma usar la palita y la bolsita para levantar los excrementos del animal. Acá eso todavía cuesta”, señaló.
En este punto, enfatizó el impacto que tienen las acciones cotidianas sobre los más chicos: “Me preocupa ver cómo muchos padres cruzan semáforos en rojo con sus hijos. Esa criatura está aprendiendo de su mayor ídolo. Lo mismo pasa con las mascotas. Si un niño ve que su padre no recoge las heces del perro, no lo hará tampoco en el futuro”, ejemplificó.
Y propuso una mirada desde la educación familiar: “Es ahí donde tenemos que inculcar valores. Los chicos deben ser quienes recuerden a sus padres: “¿Trajiste el collar del perrito?”, o “Papá, te olvidaste la bolsita para juntar la caca”. Así es como se mejora la conducta ciudadana”, reflexionó.
Depiaggio también se refirió a la diferencia entre perros callejeros y perros en la calle: “Muchas veces no son perros de la calle, sino perros con dueño, sueltos en la vía pública. Ahí surgen los accidentes, las mordeduras. Por eso, siempre collar, correa y la bolsita. Es simple”, manifestó.
COMPARACIONES
El veterinario comparó la situación de Goya con otras ciudades: “En Corrientes es parecido a lo que pasa acá. Pero cuando voy a lugares como Buenos Aires, noto que ya está incorporada la conducta. Hay menos caca en las veredas que en Goya”, reconoció.
Y cerró con un llamado a la acción colectiva: “Creo que falta que nosotros y los medios difundamos más sobre la conducta y el juntado de excrementos de los perros. La buena conducta de un vecino hace que el otro imite, porque se da cuenta de que se vive de una mejor manera. Cuando uno empieza a juntar las heces, hasta le da vergüenza a aquel que no lo hace. Así se empiezan a corregir las conductas”, concluyó el Dr. Pedro Depiaggio.
Dirección de Prensa – Municipalidad de Goya.